domingo, 28 de noviembre de 2010

Tengo un pene enorme


Lo fotografié. No es que yo quiera presumir de lo mío, no se trata de eso, ¡mentes calenturientas!.- El pene, el monumental pene al que hago referencia, lo encontré en un viejo cuartel de artillería defenestrado que estos días acoge, de manera temporal en Murcia, una exposición de arte contemporáneo denominada Manifesta8.
Me resultó muy alegórico contemplar ese descomunal pene en un cuartel de artillería. Pensé, tonto de mí, que, con toda probabilidad, ese pene hubiese dejado en mantillas al cañón más grande de la compañía, lo que podría haber desmotivado mucho a toda la guarnición o, por el contrario, imaginé una parada militar donde, en lugar de pasear a una vieja cabra chocha, los militares pasearían en un carruaje al Dios Pene ante los vítores del populacho. (cada día, no sé por qué, pienso más pendejadas).
A lo largo de la Historia, los cuarteles siempre han albergado el lado más macho de la sociedad. Esto no es de ahora, viene de lejos. Los militares son al pene, lo que los curas a los credos. Las legiones romanas lucían en las bridas de sus monturas exvotos fálicos,con los que, supuestamente, obtenían protección y vigor para la batalla.
Los hombres sentimos devoción por nuestro pene. De hecho, la mayor parte de las veces, nos sustituye de manera sorprendente a las funciones del cerebro, por lo que cientos de miles de estudiosos de todo el mundo andan investigando la relación entre el semen y la masa ence-fálica...
Antropólogos, biólogos y sexólogos de varias universidades han formado un equipo multidisciplinar para valorar, de una vez por todas, si es el hombre o es el mono, el animal que más se masturba sobre la corteza terrestre.
Después de mucho pensar, he de reconocer la elocuencia y destreza de los comisarios de la exposición, ya que, de las muchas alternativas que tenían para depositar el pichurrón, como por ejemplo: una antigua oficina de correos, unas antiguas caballerizas, un museo de bellas artes, una vieja prisión, etc, el pene a ido al cuartel, como la abeja al panal.
Lo del gran pene, es una pena.

2 comentarios:

  1. Bueno no se que tanto sea tan belico los que reposan a las entradas de pequeñas fincas o aquel que descansa erecto en la mitad de un valle cuyo nombre " el infiernito " bien pareciera una apologia al placer si vienes a colombia no dejes de ir a villa de leyva y te daras cuenta que tan importante es tu pene por estos lados.
    Pero amigo Jose el tuyo pareciera una apologia a la famosa frace boy scauts " Siempre listos"

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  2. bueno en eso tienes razon el hombre es el q muchas veces piensa con la cabeza q esta entre sus piernas y no con su cerebro, como decimos aqui, no se si habras podido observar las culturas incas donde estan los huacos eroticos, que se podria decir q son el kamasutra inca.

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